Una mirada sistémica de la Depresión a través de las Constelaciones Familiares
“La depresión es un sentimiento de vacío, no de tristeza o de dolor. Una sensación de vacío indica la falta de uno de los padres. Así, el corazón solo se llena a medias”. Bert Hellinger.
El mundo en donde vivimos sataniza a la depresión, le da la espalda y la señala mientras se va haciendo presente cada vez más en la sociedad a tal punto que la Organización Mundial de la Salud la ha catalogado como una de las mayores epidemias del siglo XXI.
Aunque el mundo incoherente en donde vivimos no la reconozca, la depresión existe, es real y tanto tú como yo la hemos sufrido. De nada sirve avergonzarse y esconderla, eso nos esclaviza y nada aporta para solucionarla.
Hoy te digo que no estás solo, hay opciones para sanarla, las constelaciones familiares es una de ellas. A través de sus leyes, nos permite hacer una mirada sistémica para encontrar la raíz y desde allí, tratarla. Nos ayuda a ver qué hay detrás de ella y del vacío que genera.
Es mucho más fácil conectarse con la tristeza y el dolor que con la felicidad, así fuimos criados y educados. Ante la depresión, te mantienes en un dolor silente, que te paraliza y te genera una sensación de vacío que no se consigue llenar con nada. La sensación que genera la depresión es como si estuviéramos ausentes de nuestra propia existencia.
Desde esa mirada sistémica que hacen las constelaciones, se busca encontrar justamente de dónde viene la sensación de la depresión partiendo de interrogantes como:
· ¿Qué pasó con el padre o la madre?
· ¿Quién falta en el sistema familiar?
· ¿De quién NO se habla?
· ¿De quién se habla mal?
· ¿A quién se excluye del sistema?
Partiendo de las respuestas a estas preguntas, las constelaciones van escudriñando poco a poco hasta llegar al fondo del vacío y desde allí comenzar a sanar. Este proceso es similar al de pelar una cebolla, capa por capa, hasta llegar al corazón, la esencia de la misma.
¿De dónde viene el vacío?
Por muchos factores, pero el más común y que, como terapeuta, he visto en grandes cantidades, es el de la ausencia de los padres. Esto deja una profunda huella en el niño, en sus pensamientos, alma, conciencia y si no se sana, desencadenará una serie de situaciones adversas en su vida.
El dolor que causa el abandono es desgarrador y de adulto, ese niño busca satisfacerlo por diferentes medios como: adicciones, apegos, malas relaciones con el dinero, con las parejas y por supuesto, en el peor de los casos, causa depresión.
La sensación de vacío que causa el abandono de los padres, ciega de tal manera que la persona no logra darse cuenta de dónde viene y es ahí cuando debe acudir a un profesional de las constelaciones para hallar las causas y trascender.
El vacío también puede venir de que la vinculación con los padres, es a través del reclamo, la rabia y las demandas constantes. Lo que realmente sucede, es que detrás de esa aparente rabia, se esconde un profundo amor de niño abandonado.
Y… ¿cuál es la solución?
La solución es sencilla, pero en muchos casos, difícil de encontrarla, solo debes tomar lo básico, lo más simple y puro que se te ha dado: EL REGALO DE LA VIDA. Luego, debes darte tu tiempo, expresar y trascender el dolor para hacerlo consciente.
Aceptar que aun con el resentimiento, el amor nos une a nuestros padres de una manera impresionante, es un vínculo irrompible, ni tu ni yo decidimos elegir quienes son nuestros padres ni nuestras familias, solo debemos perdonarlas y aceptarlas.
Esto es un proceso que requiere tiempo y compromiso, no es de la noche a la mañana, pero te darás cuenta que cuando lo intentes, tu propia vida comenzará a dar otros frutos y tu realidad se convertirá en la que deseas.
¿Quieres conocer más sobre este proceso? ¿Deseas mejorar tu relación con tus padres? ¿Estás pasando por un momento de depresión?
Contáctame y te acompañaré en el proceso de encontrarte.
REYNA REAL
Foto de Liza Summer en Pexels