«Se me ha dado tanto que no tengo tiempo para reflexionar sobre lo que se me ha denegado”.
Helen Keller
Nos han educado bajo la premisa de que agradecer es dar las gracias en todo momento, y aunque eso es cierto, la gratitud es un valor que va mucho más allá de una simple norma de cortesía. Ser agradecidos es definitivamente algo más que ser 100% educados.
Se trata más bien de no conseguir todo lo que uno quiere y aun agradecer por lo que se tiene. Todos los destinos son efímeros, mientras que el camino, es eterno. ¿Crees que sea posible dar gracias en todas las circunstancias? Sí.
Cuando nos hacemos conscientes de que la vida tiene un valor inmenso, ya eso es un motivo para agradecer. No importa la circunstancia, todos somos dueños de nuestra propia realidad y el solo hecho de vivirla, es otra razón para dar gracias.
Estoy segura que existe algún elemento de la circunstancia que estás viviendo por el que puedes estar agradecido. Recuerda, lo que estás viviendo es producto de tus decisiones, actos y pensamientos y, por lo tanto, debe haber algún motivo para agradecer por ello.
El agradecimiento como fuerza de vida
Cuando trabajas el agradecimiento como fuerza de vida, te darás cuenta poco a poco, como la queja, la victimización y la culpa de alejan de tu vida. Es simple, dar gracias es sentir amor y luz, lo contrario es estar en miedo y en oscuridad.
¿Quieres una mejor vida? No te quejes, soluciona, agradece que tienes una vida para vivir y comienza a trabajar ya mismo en todo aquello que necesite atención. Agradece porque tienes una nueva oportunidad para aprender y lograr lo que quieres.
Da gracias por las personas que están a tu lado. Todos vinimos a la vida a aprender. Si sientes que alguien te falló, agradece también, ya que de esa circunstancia obtendrás un gran aprendizaje que te ayudará a crecer.
Hagamos un ejercicio
Escribe en una hoja de papel todos los agradecimientos para que influyan en tu mente y tus elecciones. Extiende tu gratitud a todo tu alrededor. Cuando comprendes verdaderamente al agradecimiento, la forma en que experimentas la vida se verá transformada.
Aplícalo en la ardua tarea que implica madurar y dejar de culpar. Cuando das las gracias desde tu ser, encuentras al menos una razón para vivir con alegría, y quien encuentra un motivo de gratitud, encontrará muchos más.
Agradece de la misma manera por lo pequeño y por lo grande. La vida es una maravillosa ilusión que nos es dada con la promesa de llegar al uno. Cuando comprendemos esto, la gratitud se convierte en una verdadera fuente de riqueza mental, espiritual y de vida.
Es muy probable que todavía estés buscando tu sueño, sin embargo, puede que sientas que te ha costado lograrlo porque perdiste tiempo, dinero y amor en personas y situaciones que no lo merecían. Tengo algo que contarte: si todavía estás determinado a conseguir lo que deseas, la “magia” se creará cuando logres alinear:
- Palabra: todo lo que digas que sea para limpiar, construir y aportar.
- Pensamientos: que sean un jardín donde no haya maleza.
- Sentimiento: coherencia con tu meta, no te dejes sabotear y céntrate en sentir lo que ya tienes.
Cuéntame, ¿por qué agradeces hoy?
REYNA REAL
Foto de Garon Piceli en Pexels