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Ante cualquier problema de infertilidad, hay muy en lo profundo un miedo pendiente que resulta ser mucho más fuerte que el verdadero deseo de ser padres

Cuando biodescodificamos nos encomendamos en la tarea de descubrir, encontrar e identificar el sentido biológico de alguna enfermedad que nos afecta. La intención, es descodificarla para poder sanarla desde su origen real.

En la mayoría de los casos, nos encontramos con situaciones en donde existe un bloqueo y como consecuencia, atravesamos por obstáculos que terminan afectando nuestro cuerpo, emociones y nuestro sentido de vida. La infertilidad es uno de ellos.

Existe un origen inconsciente de la infertilidad que no tiene que ser necesariamente tuyo, más bien, podría venir de tu familia y de tus ancestros más remotos, y es justamente aquí cuando la biodescodificación se hace necesaria como herramienta para solucionar al problema desde su verdadero origen.

Tenemos codificadas ciertas pautas que en muchos casos nos hacen actuar de cierta y determinada manera porque sencillamente son herencias de nuestros ancestros. El problema radica en que, así como podemos heredar ciertas pautas positivas, también podemos heredar las negativas.

Cuando trabajamos la biodescodificación estudiamos a profundidad todas esas pautas. Es importante que en todo este proceso no olvides el poder de tu inconsciente, esa parte que trabaja todo el día sin parar y que en muchas oportunidades nos juega malas pasadas provocando enfermedades, conductas y síntomas como la infertilidad que nos impiden concretar nuestro propósito de vida.

La infertilidad y su origen emocional

¿Sabías que más de la mitad de los casos de infertilidad tienen un origen emocional? Problemas relacionados con la cantidad y calidad del esperma, envejecimiento de los óvulos o inmadurez de los mismos, dificultades para la concepción, rechazo de espermas, entre otros, tienen su origen en la mayoría de los casos en nuestras emociones más que en una dificultad física per se.

Cuando aplicamos herramientas que nos brinda la biodescodificación estamos acercándonos hacia esa raíz que nos impide ser fértiles. Comienza por preguntarte cuál es la emoción biológica oculta en tu dificultad para procrear: ¿estás viviendo una situación de miedo a ser padre o madre? ¿te resistes a serlo inconscientemente? ¿no sientes una verdadera necesidad de tener hijos?

Luego que respondas a este tipo de preguntas, céntrate en el foco del conflicto emocional que estás viviendo. Para muchos, el ser infértiles forma parte de una experiencia de vida que deben atravesar sí o sí, para poder encontrar un verdadero aprendizaje que los ayudará a encontrar sentido a sus vidas.

¿Solo quieres tener un hijo porque crees es normal hacerlo? ¿deseas traer un hijo al mundo solamente porque tus padres te exigen ser abuelos? ¿quieres ser mamá / papá porque crees no ser suficiente como mujer o como hombre? 

Centrándonos en este último ejemplo, específicamente en el caso de que una mujer quiera tener un hijo para sentirse “más mujer”, la verdadera razón tras ese deseo, es que no desea que la abandone su pareja porque le resulta difícil aceptar su feminidad.

Esta mujer será estéril precisamente para que aprenda a ser feliz tal cual es y se acepte completamente sin tener hijos. Una vez ella trabaje en este aprendizaje y lo ponga en práctica, dará fin a su problema de esterilidad y se convertirá en una verdadera madre.

Ante cualquier problema de infertilidad, hay muy en lo profundo un miedo pendiente que resulta ser mucho más fuerte que el verdadero deseo de ser padres. Y ojo, esto también es aplicable al futuro papá. Puede que sea él y no ella quien presente estas dificultades a la hora de procrear, en cualquiera de los casos, se debe poner orden al árbol genealógico y a las emociones que están afectando.

¿Conoces tu árbol genealógico?

Conocer el árbol genealógico completo es imprescindible, sobre todo, para aquellos casos donde la infertilidad es causada por un orden transgeneracional que parte desde mensajes como “ser madre es peligroso”, “si eres madre, mueres” o “tener hijos es malo. Incluso, la infertilidad podría manifestarse en quien se considera a sí mismo improductivo.

¿Te han diagnosticado como estéril? ¿estás presentando algún problema de infertilidad? Utiliza la biodescodificación para tomar conciencia de la verdadera razón por la que deseas tener un hijo: ¿realmente es tu deseo o te está obligando tu entorno?

Luego, estudia tu árbol genealógico para encontrar historias que aclaren la verdadera razón por la que no debes o no quieres tener hijos:

¿Conoces a alguien de tu familia que tuvo problemas al dar a luz?

¿Qué aprendiste de tus progenitores con respecto a tener hijos?

¿Tienes miedo de perder a alguien?

¿Sientes temor de perder tu “hermosa figura”?

Cuando seas consciente de cualquier miedo de tu pasado con respecto a procrear podrás preguntarte si ese miedo es tuyo o lo estás heredando de alguien de tu sistema familiar.

REYNA REAL

Foto de RODNAE Productions by Pexels